Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

II Samuel 19, 22-27

22 Entonces Abisay, hijo de Sarvia, tomó la palabra y dijo: «¿Es que

no va a morir Semeí por haber maldecido al ungido de Yahveh?»

23 Pero David dijo: «¿Qué tengo yo con vosotros, hijos de Sarvia, que
os convertís hoy en adversarios míos? ¿Ha de morir hoy alguien en Israel?

¿Acaso no conozco que hoy vuelvo a ser rey de Israel?»

24 El rey dijo a Semeí: «No morirás.» Y el rey se lo juró.

25 También Meribbaal, hijo de Saúl, bajó al encuentro del rey. No
había aseado sus pies ni sus manos, no había cuidado su bigote ni
había
lavado sus vestidos desde el día en que se marchó el rey hasta el día en que
volvió en paz.

26 Cuando llegó de Jerusalén al encuentro del rey, el rey le dijo: «¿Por
qué no viniste conmigo, Meribbaal?»

27 Respondió él: «¡Oh rey, señor mío! Mi servidor me engañó: Tu
siervo le había dicho: “Aparéjame el asno; montaré en él, y me iré con el
rey”, porque tu siervo es cojo.